REGULACIONES
Sistema actuado
El regulador se encuentra a la espera, con todos los semáforos en color rojo, de una demanda por parte de un vehículo a través del sistema espira-detector o de un peatón mediante un pulsador al efecto. Recibida la demanda, el regulador inicia la secuencia de colores para el movimiento demandado y finalizado este, se mantiene de nuevo a la espera con los semáforos en rojo o inicia una nueva secuencia si es demandado por otro vehículo o peatón.
Suele instalarse este tipo de regulaciones en zonas de baja o media intensidad en el tránsito de vehículos a motor, donde no exista una clara vía principal con acceso continuo de tráfico o en lugares donde el tráfico este condicionado a horarios.
Si bien se desaconseja, como norma general, la utilización de este tipo de regulación en zonas urbanas o de gran densidad de tráfico; y teóricamente, en travesías urbanas, en tránsito de poblaciones y en conjuntos de intersecciones dispuestas en rutas longitudinales con accesos de intensidades bajas o medias ya que, durante el día, la distribución no uniforme de los rojos en los diferentes puntos de la ruta, condicionaría la velocidad media de los vehículos habituales de la zona e impediría conocer al conductor de antemano cual es la velocidad más alta de paso.
Sin embargo, durante la noche, cuando la intensidad de vehículos decrece y su velocidad aumenta considerablemente, se controlaría esta, ya que hasta que el vehículo no haya establecido una demanda de paso en el primer cruce de su ruta, la intersección regulada con semáforos no gestionará su paso, lo que provocará la disminución automática de la velocidad de paso por la zona.
La buena distribución de los puntos de demanda, e incluso la interconexión de todos ellos en la vía principal de la zona regulada, mejoraría la respuesta del conjunto al obtener una demanda colectiva para todos los cruces cuando el vehículo entrase en la zona regulada.
Suele instalarse este tipo de regulaciones en zonas de baja o media intensidad en el tránsito de vehículos a motor, donde no exista una clara vía principal con acceso continuo de tráfico o en lugares donde el tráfico este condicionado a horarios.
Si bien se desaconseja, como norma general, la utilización de este tipo de regulación en zonas urbanas o de gran densidad de tráfico; y teóricamente, en travesías urbanas, en tránsito de poblaciones y en conjuntos de intersecciones dispuestas en rutas longitudinales con accesos de intensidades bajas o medias ya que, durante el día, la distribución no uniforme de los rojos en los diferentes puntos de la ruta, condicionaría la velocidad media de los vehículos habituales de la zona e impediría conocer al conductor de antemano cual es la velocidad más alta de paso.
Sin embargo, durante la noche, cuando la intensidad de vehículos decrece y su velocidad aumenta considerablemente, se controlaría esta, ya que hasta que el vehículo no haya establecido una demanda de paso en el primer cruce de su ruta, la intersección regulada con semáforos no gestionará su paso, lo que provocará la disminución automática de la velocidad de paso por la zona.
La buena distribución de los puntos de demanda, e incluso la interconexión de todos ellos en la vía principal de la zona regulada, mejoraría la respuesta del conjunto al obtener una demanda colectiva para todos los cruces cuando el vehículo entrase en la zona regulada.
Sistema semi actuado
El regulador realiza la secuencia cíclica de movimientos programados con intervalos de tiempo fijo, iniciando de nuevo su secuencia cuando esta termina. Cuando se realiza una demanda en uno de los movimientos no fijos, este se incorpora a los movimientos programados a tiempos fijos en su lugar pre-programado y finalizado éste, es eliminado del programa de secuencias hasta solicitarse una nueva demanda por parte de los elementos de tráfico.
Su instalación está dirigida a aquellas zonas donde la diferencia de intensidades entre la vía principal y las secundarias es importante, existiendo además la posibilidad de sincronizarse con otros cruces en la zona, siempre en el movimiento con programación cíclica.
Su instalación está dirigida a aquellas zonas donde la diferencia de intensidades entre la vía principal y las secundarias es importante, existiendo además la posibilidad de sincronizarse con otros cruces en la zona, siempre en el movimiento con programación cíclica.
Sistema de tiempos fijos
Todos los movimientos tienen unos intervalos de tiempo rojo-verde fijos que se suceden de modo cíclico e inmutable a las necesidades o carencias en el tráfico. Es el tipo más común de instalación, especialmente en sistemas informatizados, aunque esto es algo que los nuevos sistemas están cambiando.
Cada uno de los modelos tiene un escenario donde sus ventajas son potenciadas y sus desventajas se minimizan, y esta balance depende en gran medida de las intensidades de los elementos que la intersección debe conjugar. Por tanto es adecuado ofrecer alguna recomentación que establezca una relación entre el tipo de regulación y la intensidad media de la zona de trabajo.
Todas estas valoraciones son puramente aproximativas y cada una de las intersecciones tratadas dispondrá de un amplio abanico de cuestiones particulares que, probablemente alejen de modo importante esta valoración aproximativa del modelo de trabajo real. El estudio de todos estos elementos distintivos de la intersección de trabajo otorgará a la decisión final un criterio exitoso.